El rock y
Madrid son dos elementos que siempre han estado unidos desde tiempos
inmemorables, y el mejor ejemplo es la tradición rockera que todavía pervive en
la capital del país. Salas como la Gruta
77, La Riviera o la mítica Caracol siguen albergando conciertos a
diario (a pesar de las numerosas dificultades del Ayuntamiento) y apostando por
un género muy vivo, el rock. Son
numerosos y míticos los rockeros que han pisado tierras madrileñas para ofrecer
infinidad de conciertos, pero en esta ocasión no iba a sonar del todo a “rock”.
El festival más loco, humorístico y peculiar del panorama español tenía una
cita en Madrid, más concretamente en el Palacio
de Vista Alegre; el Mundo Idiota celebraba su 6ª edición
consecutiva y lo hacía de la mejor manera, invitando a catorce bandas
españolas, entre las que nos encontrábamos a míticos grupos como Def Con Dos o Mamá Ladilla.
Foto: R.Otazo. Los Gandules en una de sus actuaciones. |
El intenso
frío azotaba Madrid desde bien entrada la mañana y nos hacía presagiar que no
se iría en el resto del día, pero cuando hay un festival de por medio el tiempo
es lo de menos, y tras encontrar el Palacio
de Vista Alegre comenzamos una larga cola que rodeaba por completo el amplio
recinto de Carabanchel. Según pudimos saber después, se obligó a la organización a modificar el sistema de acceso a Vistalegre, y esto provocó las largas colas de espera. Más de una hora y cuarto de frío y lluvia después
entramos a un recinto embriagado por las guitarras de Dun y Tobo, Los Gandules
estaban ya en escena. Vestidos con bata, zapatillas de estar por casa y sentados
en un sofá, estos peculiares aragoneses hicieron vibrar a un público que aún
estaba calentándose y entrando al recinto. Canciones breves con mucho humor y
sátira como “Ese loco material” o
largos remix que no abandonan lo cómico como la “Década Apestosa” terminaron de exaltar a los asistentes que
cantaban a coro las canciones de estos compositores.
Su tiempo de actuación pronto expiró, y cuando nos quisimos dar cuenta ya teníamos en el escenario a Juan Abarca y su banda más longeva, Mamá Ladilla. Los años y la música no pasan en balde, y Juan Abarca es un claro ejemplo de ello, pero a pesar de esto no podemos ponerle ninguna pega al concierto que ofreció. Con guitarra de Los Gandules y amplificador de El Reno Renardo, Juan Abarca dió un repaso a muchos de los conocidos temas de la banda como “Cosas que joden”, la extensa “Nave mix” o “Sucedió en Beckelar” que terminó de enloquecer a los fans de la banda. No faltaron tampoco clásicos como "Chanquete ha muerto" u "Otra subnormalidad".
Su tiempo de actuación pronto expiró, y cuando nos quisimos dar cuenta ya teníamos en el escenario a Juan Abarca y su banda más longeva, Mamá Ladilla. Los años y la música no pasan en balde, y Juan Abarca es un claro ejemplo de ello, pero a pesar de esto no podemos ponerle ninguna pega al concierto que ofreció. Con guitarra de Los Gandules y amplificador de El Reno Renardo, Juan Abarca dió un repaso a muchos de los conocidos temas de la banda como “Cosas que joden”, la extensa “Nave mix” o “Sucedió en Beckelar” que terminó de enloquecer a los fans de la banda. No faltaron tampoco clásicos como "Chanquete ha muerto" u "Otra subnormalidad".
Dos intensos
conciertos empezaban a hacer mella en el cuerpo pero lo mejor estaba por venir,
Lendakaris Muertos aparecían en
escena. “Gora España” encendió la
mecha de un concierto que no pudimos terminar de ver, ya que teníamos que desplazarnos hasta la sala Gruta 77 donde tocaba uno de los grupos más peculiares del festival, Puta España Musical. De camino a la sala nos encontramos con compañeros que nos daban una triste noticia, P.E.M. (Puta España Musical) ya había tocado, ¿por qué? Al parecer la Policía se había presentado a las seis de la tarde con acta municipal que obligaba a la sala Gruta 77 a cerrar antes de lo previsto. Un festival que iba a durar hasta las seis de la mañana, y que finalmente por motivos que aún desconocemos tuvo que cerrar a la una y media de la madrugada, provocando una reestructuración del horario de la sala y una considerable reducción de tiempo de actuación para los grupos presentes.
Eran las nueve de la noche, y aprovechamos el viaje a la sala Gruta 77 para ver el concierto de José Córdoba, más conocido por todos como El Chivi. El cantautor madrileño apenas contó con media hora de actuación pero a pesar de ello demostró que es capaz ofrecer mucho en poco tiempo, temas como "Falo Anus" o su más que conocida "Radikal" fueron cantadas a coro por todos los allí presentes, además ésta última canción contó con la colaboración de uno de los integrantes de P.E.M. a la guitarra.
Terminó El Chivi y nos desplazamos de nuevo hasta el Palacio de Vistalegre donde Lendakaris Muertos había dejado el ambiente muy caldeado para el El Reno Renardo. Una banda con apenas cinco años de historia, que ha conseguido hacerse un hueco en el mundo del freak metal a base de buena música y mejores letras. Con un poco de retraso, empezábamos a escuchar la ya clásica sintonía de inicio de la banda “Típica Intro”. Jevo y su banda presentaban disco, y por desgracia para los fans más nostálgicos la mitad del concierto corrió en torno a Babuinos del Metal, último álbum de la banda. Un inicio más tranquilo en el que sonaron “Majestad cuidado con la gravedad” o “Festival”, dos de los singles de su último disco impacientaban al público pero cuando más falta hacía sonaron los primeros acordes de “El Bogavante”, un tema mítico de la banda que parecía ya olvidado en el camino. A partir de aquí sonaron canciones conocidas por los fans como “Crecí en los ochenta”, que permitieron que más de uno se dejara la voz en el Palacio de Vista Alegre. Sin embargo dos canciones quedaron en el tintero por culpa de la falta de tiempo, "Chicken es pollo" y "Camino Moria" no pudieron ser interpretadas por la banda para pena de los asistentes.
Eran las nueve de la noche, y aprovechamos el viaje a la sala Gruta 77 para ver el concierto de José Córdoba, más conocido por todos como El Chivi. El cantautor madrileño apenas contó con media hora de actuación pero a pesar de ello demostró que es capaz ofrecer mucho en poco tiempo, temas como "Falo Anus" o su más que conocida "Radikal" fueron cantadas a coro por todos los allí presentes, además ésta última canción contó con la colaboración de uno de los integrantes de P.E.M. a la guitarra.
Terminó El Chivi y nos desplazamos de nuevo hasta el Palacio de Vistalegre donde Lendakaris Muertos había dejado el ambiente muy caldeado para el El Reno Renardo. Una banda con apenas cinco años de historia, que ha conseguido hacerse un hueco en el mundo del freak metal a base de buena música y mejores letras. Con un poco de retraso, empezábamos a escuchar la ya clásica sintonía de inicio de la banda “Típica Intro”. Jevo y su banda presentaban disco, y por desgracia para los fans más nostálgicos la mitad del concierto corrió en torno a Babuinos del Metal, último álbum de la banda. Un inicio más tranquilo en el que sonaron “Majestad cuidado con la gravedad” o “Festival”, dos de los singles de su último disco impacientaban al público pero cuando más falta hacía sonaron los primeros acordes de “El Bogavante”, un tema mítico de la banda que parecía ya olvidado en el camino. A partir de aquí sonaron canciones conocidas por los fans como “Crecí en los ochenta”, que permitieron que más de uno se dejara la voz en el Palacio de Vista Alegre. Sin embargo dos canciones quedaron en el tintero por culpa de la falta de tiempo, "Chicken es pollo" y "Camino Moria" no pudieron ser interpretadas por la banda para pena de los asistentes.
Def Con Dos |
El tiempo se
acababa, y el colofón final estaba cada vez más cerca. La cabeza de cartel, Def Con Dos saltaba (y nunca mejor
dicho) al escenario de Carabanchel con mucha fuerza y energía, y por supuesto
con su líder Cesar Strawberry a la
cabeza. Tres voces son siempre mejor que una, y Marco Masacre y Peón Kurtz
demostraron ser el perfecto complemento de
Strawberry y una banda que
cada vez apuesta más por el rap metal. Crítica social, ironía y verdades como
puños se mezclan en canciones de Def Con
Dos como “De cacería”, “Hipotécate tú” o “Cazador de elefantes”, muy apropiadas para la época. Un concierto
que rozó la perfección y que no tuvo un
momento de descanso para la banda, que aprovechó íntegramente la hora de la que
disponía. El broche lo puso “El día de la
bestia”, quizás el tema más conocido de la banda y que por un momento
pareció invocar de verdad a Lucifer en Vista Alegre.
No nos hubiera
venido mal su aparición y con él algo de calor, pero el festival había llegado
a su fin con los madrileños Def Con Dos.
Un día frío, intenso y duro que no pudo con el rock, porque éste sigue muy
vivo.
Carlos J. Saura Cebrián / @CarlosSC14
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